Hay esta sensación cuando ves en una película o lees en un libro la descripción de un sitio donde ya has estado alguna vez, y la descripción es tan exacta que te hace revivir este lugar, esa ciudad y sientes que estás ahí plenamente. También hay mucha literatura donde figura nuestra ciudad. Por hoy he elegido una descripción de Madrid del libro "la nada cotidiana" de la escritora cubana Zoé Valdés, que expresa muy bien una faceta de Madrid, aunque faltan muchas otras.
El libro "la nada cotidiana" trata de Patria, una mujer cubana que se siente atrapada en su isla, con un sistema político muy singular que no le deja libertades personales. Lo único que quiere es salir de la isla y tener algo de acción en su vida.
La mejor amiga de Patria, a Gusana, se ha casado con un madrileño con el único fin de salir de Cuba. Ahora vive en Madrid, y Patria espera con ansiedad sus cartas que le cuentan de la vida en la capital. Patria se imagina que su amiga pasea por los museos, sale de noche, tiene un montón de amigos y vive una vida feliz en Madrid. Sin embargo, la carta de la Gusana retrata otra realidad:
"Sí, claro que compro todos los días un jaberío de naderías. Aquí comprar es un vicio y yo soy una viciosa, ¡tengo sangre para los vicios! Y la televisión corrompe. En eso le doy razón a los hablacáscaras de allá, la propaganda es realmente enemiga, pero enemiga del bolsillo. Oye, que te va envolviendo y eloqueciéndote: hoy una marca de cahmpú, mañana el acondicionador y pasado mañana la cera depiladora, y los helados, los dulces, el jabón éste y el otro y el de más allá con leche de cabra y glicerina, y el perfume de mañana y el de tarde y el de noche, que le pararían la cabilla hasta al viejo don Rafael del Junco, el de El derecho de nacer, la radionovela que nos contaban nuestras madres y que aquí he visto en folletines televisivos. También la escuché en la radio y vi la película, ¡tremenda mierda! Cada día salgo al Corty, que es el nuevo nombre de El Corté Inglés, y gasto un dineral en hebillitas de pelo, cepillos de dientes de diferentes modelos, vestiditos en rebajas, medios con defectos, colonias de segunda y comida, mucha comida. [...]Madrid es una ciudad bastante sucia y abarrotada de turistas. Los madrileños se mueren por parecer americanos. Hay una vida nocturna excitante, pero yo no participo de ella. No solamente porque no debo abandonar tan seguido a mi Foca, sino porque no me atrevo a salir de noche, y porque aquí el crepúsculo es bien caro, y además me jode arrastrar mi soledad por aceras que nunca me pertenecerán verdaderamente."
Para más impresiones de Madrid, se puede leer toda la carta que La Gusana le escribe a Patria. También es altamente recomendable leer el libro, como otros libros de Zoé Valdés es un gusto literario!
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar! Responderé pronto!